Para todo emprendedor comunicar su producto o servicio significa un reto tremendo. Toca maximizar los recursos y usualmente se cuenta con poco dinero. En 25 años ejerciendo el periodismo perdí la cuenta de cuántos han pasado por mi libreta de apuntes. He visto y vivido casi todo, desde grandes acierto hasta errores que rayan en lo vergonzoso. Pero de todo se aprende.
Difícil saber qué funciona y qué no para lograr el éxito o lo que cada quien conciba como tal.
Algunas recomendaciones para que la comunicación sea más efectiva:
1. No hables mal de la competencia.
Entre emprendedores la competencia es feroz, no es sencillo sobresalir en un espacio donde el público (en teoría es pequeño) y las opciones se amplían. Entonces, toma fuerza la creencia que toda persona que trabaje en el mismo sector, resta clientes, espacio, hace que facture menos. No te hace mejor a ti o tu producto desmerecer al otro. Hablar mal de la competencia (por lo menos yo) lo veo como signo de mucha inseguridad.
2. A estas alturas nadie ha inventado nada.
Me fastidia tremendamente cuando entrevisto a alguien y se queda enganchado en discurso “somos lo primeros”, “lo inventamos nosotros”, “antes de nosotros esto no se hacía”, entre otras expresiones similares. El dato es importante y se registra, pero no te hace mejor, ni más competitivo. Que tu producto se destaque por su calidad, porque resuelve o responde a una necesidad.
3. La imagen de tu marca no es juego.
Cuando hagas tu presupuesto, invierte en la imagen. Te presente que es la primera impresión, y vivimos en un mundo donde lo visual prevalece. Entiendo que ahora hay programas que te hacen el logo, o tienes un amigo o familiar que «te hace el favor», pero cuando un profesional está metido en esto, se nota y mucho.
4. Que tus redes sociales reflejen tu trabajo. Replica lo que digan de ti.
Trabajan en tus redes, explica allí de qué se trata el producto o servicio que ofreces. Será lo primero que buscará quien te entrevistará o reseñará. Que tu nombre sea fácil de encontrar y recordar.
Cuando alguien te entrevista para un medio de comunicación (grande o pequeño), su nota será una más entre las que publica. En dicho medio será publicada una vez y reseñada con mucha suerte un par de veces en sus historias. TEN PRESENTE todas las notas son importantes, replícalo en tus redes varias veces, etiqueta tus clientes fijos o potenciales. Eso alargará vigencia de la nota, sino pasará a ser archivo muerto muy pronto.
5. Invierte en fotos de calidad.
Que las fotos estén en varios formatos: horizontal, vertical, cuadradas, además de varias resoluicones. Si bien la mayoría de los medios toman sus propias fotos, siempre viene bien contar con otras imágenes de calidad. En muchos momentos, cuando falta una foto (hecho más frecuente de lo que imaginan) se usa la mejor que se tiene a la mano y eso significa doble presencia.
6. El periodista no es tu amig@, ni toma dictado.
Nunca le digas a un comunicador “te voy a contar algo, pero no se lo digas a nadie”. Craso error. Tampoco «escribe esto o aquello». Recuerda, el periodista es un profesional que hace su trabajo que es registrar y publicar tu historia.
Solo di lo que puedas sostener pública y privadamente. Eso incluye evitar hablar mal de la competencia. Céntrate en tu proyecto, cuenta con naturalidad de qué se trata, el alcance que tiene, la necesidad que responde, si es un emprendimiento familiar o entre amigos, narra tranquilamente lo que te motiva, lo que deseas lograr y el servicio que deseas prestar.