Una de las mejores cosas que me han sucedido en la vida ha sido visitar Europa en primavera, después que los sentidos se impregnan de las miles de flores que crecen por doquier, bien sean cultivadas o silvestres, se hace imposible apreciar a los pintores impresionistas de la misma manera. Un Monet o un Renoir, por ejemplo, nunca más se disfrutarán del mismo modo y pareciera hasta lógico que se dedicaran a plasmar en sus lienzos la naturaleza con tanta pasión.
Uno de mis grandes descubrimientos fueron los Papaveros o Moon flower que crecen salvajes durante el mes de mayo y que tiñen de rojo los campos italianos, en especial la Toscana. Sí, esa flor que Kenzo ha hecho tan famosa con su perfume Flowers y que durante un solo mes al año crece en sitios insospechados y a su vez es la pesadilla de los agricultores porque se le considera mala hierba.
Madrid explotaba en colores, flores en las aceras, en las plazas, en las entradas de las casas, en los parques. En Italia, por ejemplo, son comunes en las puertas de los negocios y en París adornaban balcones y vidrieras.
Fotografié muchísimas flores porque se hizo imposible ignorarlas, aquí solo dejo un extracto.
¡espectaculares! Pero la foto tuya en el tren le gana a todas, jajajaja. Vivan las flores de mayo!!!
¡Bienvenida a casa Vane¡. Gracias por hacer posible que, a través de tus historias, viajarámos junto a ustedes. Espero la "versión larga" de los cuentos. Besos.