Vito Giambanco. Pescadero. Nacido en Suiza de padres italianos es más venezolano que una arepa rellena con guiso de cazón, que seguramente viene aderezada de mucho ají dulce margariteño, porque se casó con una neoespartana que cocina como las mejores. Trabaja en el negocio familiar desde los 12 años, cuando ocupaba sus sábados lavando cavas, organizando neveras, descamando y fileteando peces y limpiando mariscos, lo que lo preparó para un oficio que hoy ejerce con responsabilidad, maestría, magnífico humor, buena educación y mucho cariño.
Desde 1988 está al frente de la Pescadería Patterdam en la avenida Victoria, un lugar que huele a mar, siempre lleno de gente, incluso abarrotado los sábados y vísperas festivas. Todos lo conocen, no he escuchado a una sola persona que hable mal de él o su trabajo, muy por el contrario. Aficionado a la buena mesa, termina dando consejos sobre cuánto y qué comprar para muchos platos, al punto que dice con picardía que jamás ha preparado una paella, pero sabe qué despacharle a un cliente cuando se lo pide.
Explorando los mares
Su nueva frontera es poner a disposición los peces pocos consumidos, los olvidados, que si bien no son de carne blanca, gruesa y ausente de espinas, son muy gustosos, económicos, generosos en posibilidades culinarias, como quisquillas, cochinillos, cojinúas, mondeques, macabíes, sardinas entre tantas delicias que se pescan en plena costa criolla y que para muchos no son más que carnada, pero para los verdaderos amantes del mar son un tesoro.
Ojalá todos los pescaderos trabajaran con su mística, al punto de conocer el gusto de sus clientes habituales, recomendarles lo que más les gusta o podría agradar y advertirles lo que posiblemente no tendrá éxito en su mesa; al mejor estilo de los buenos libreros que al descuido dejan caer libros en la mesa para sus “habitués”.
Una similitud nada casual porque Giambanco pone sobre la mesa delicias que nos hacen descubrir la riqueza de nuestro propio mar, al que hemos limitado en las pescaderías, pero que se muestra generoso en posibilidades y sabores. #talentosabroso2015 #Caracas #amoAMIsVecinos #pescadero #avvictoria #microhistorias #oficiossabrosos
Gracias Vanessa por tu pasión periodística y como venezolana, y por hacernos conocer todas esas alternativas de Ciudad, de gastronomía y de vida.
Con ese reportaje tan bueno es difícil no tener curiosidad y atreverse a la aventura de probar esos peces poco consumidos.