Un toque dulce al final es agradable, cierra con broche de oro una comida completa. Aunque posiblemente más de un goloso piense lo contrario, viva y respire por ese trozo de torta o un helado.
Abstenerse del postre no es sinónimo de una mejor alimentación, existen muchas alternativas para comérselo sin culpa y disfrutarlo a plenitud, además si se escogen los ingredientes adecuados, es el complemento nutritivo perfecto. Para los expertos en alimentación el truco está en las palabras equilibrio, compartir, moderación y por supuesto, la selección de los ingredientes correctos.
A continuación siete ingredientes que, juntos o separados, son grandes aliados para una postre saludable, nutritivo y bajo en calorías:
Chocolate: Durante muchos años ha sido la fantasía de cuanto goloso camina por el mundo, pero en verdad el chocolate no es dulce, sino amargo, es decir que comer chocolate libre de azúcar y de leche es una opción perfecta.
Solo hay que tomar en consideración que incluso sus versiones “ligeras” – bien sean con edulcorantes o sin azúcar – solo tienen un 30% menos de calorías, porque no hay que perder de vista la grasa que lo conforma.
Sin embargo, con moderación se puede consumir a todo gusto. Prepare un fondue y acompáñelo con frutas frescas. Otra alternativa es prepararlo como sirope sobre helados bajos en calorías. Aunque el placer de un trocito travieso de chocolate es irresistible.
Té e infusiones: Son grandes aliados para preparar gelatinas, sorbetes, raspados y hasta como saborizante de ensaladas de frutas. Por otra parte, el té es un antioxidante maravilloso, es decir que además de sabroso, será beneficioso para su piel y su belleza.
En el caso de las infusiones, no es complicado mantener en la ventana una plata de malojillo, hierba luisa u orégano orejón. También puede ayudarse con especias como canela y clavitos de olor. Pruebe haciendo cócteles o congelar cubos de hielo saborizados que pueden ayudar a calmar la ansiedad.
Frutas: Indudablemente las frutas frescas deben integrar esta lista y aunque casi todas son beneficiosas, no hay que perder de vista que algunas aportan más calorías que otras. Sin embargo, siempre es mejor escoger un postre a base de fruta fresca que uno saturado de cremas y harinas. Desde comerla en su estado natural, en ensaladas, macedonias, o sobre tortas y pasteles, con gelatinas o yogur. También utilícelas como acompañantes de helados, en vez de dos raciones sírvase solo una y a su lado una trozo de fresca, dulce y jugosa.
Otra opción son las frutas deshidratadas, que tienen las mismas cantidades pero sin el agua que las compone, lo que sí es importante es mantener a raya cualquier presentación en almíbar o confitadas.
Edulcorantes y miel: Con los postres ligeros hay que tener cuidado, porque de nada vale sustituir el azúcar, si permanece la mantequilla, la harina, los huevos, la crema de leche por solo nombrar algunos ingredientes. Mucho ha avanzado la calidad de los edulcorantes en general, se pueden adquirir en varias presentaciones, la gran mayoría soporta el calor y ha desaparecido ese desagradable sabor que dejaban como residual en el paladar. Gran cantidad de postres admiten sustituir el azúcar por edulcorantes.
Por su parte, la miel es un endulzante natural con gran cantidad de cualidades nutritivas y curativas, su sabor agradable la hace la preferida de muchas personas que vigilan su alimentación, pero no hay que abusar, es solo un par de cucharadas al día, siendo muy generosos.
Lácteos descremados: Esta categoría la integran desde la leche, pasando por yogur, quesos y helados. La ausencia de grasa animal tiene dos beneficios importantes: disminuye la cantidad de calorías y ayuda a controlar el colesterol.
Tome sus precauciones con algunos lácteos como la crema de leche cuando los ofertan como “ligeras”, no es mucha la diferencia. Pero en todos los casos, cerciórese que sea libre de grasas o semi descremado.
En este caso solo hay que ser creativo, con yogur puede preparar helados, copas de frutas y sorbetes. También aventúrese por natillas y mousses. Algunos quesos como el ricota, permite combinarlo con frutas y llevarlo al horno para preparar tortas deliciosas.
Cereales: Aunque son aliados maravillosos hay que prestar atención a las cantidades y a no comerlos en exceso. Los cereales como avena, afrecho, harinas integrales no tienen menos contenido calórico, pero ayudan al proceso digestivo, lo cual puede ser una bendición para personas con problemas de estreñimiento, además contribuyen a depurar el organismo. Cuando coma barras de cereal lea con atención la etiqueta y esté cociente de los números.
Gelatina: Sola o acompañada, con o sin frutas el placer de comerla es refrescante y sacia el hambre. Muchos son los ingredientes con la que establece una simbiosis maravillosa ya que cuaja, enaltece o endurece algunas preparaciones. Intente hacer infusiones con flores como rosas o violetas y añádales gelatina, un postre de otro planeta.