LA COCINITA DE PAPÁ es un blog de cocina, pero también es un proyecto de amor de un papá que desea que sus hijos aprendan a comer bien y encontró la manera de establecer una dinámica familiar de integración, de educación, de inculcarles los valores de la responsabilidad, el trabajo y la constancia a sus hijos a través de los fogones. Es decir, una fórmula que se desarrolla en varios niveles: uno físico con recetas, videos, niños aprendiendo a cocinar o a sembrar en sus propio huerto, pero también ha resultado fértil en terrenos emocionales y morales.
El periodista José Baig – quien fue mi preparador de géneros periodísticos en la universidad – estudió cocina y cuando le llegó la hora criar a sus tres hijos entendió que la mejor manera de ensañarlos a comer era tomando el asunto en serio y decidió dedicarle tiempo. El plan de acción comenzó con recetas sencillas, luego un blog, pero ha crecido a tal punto que ya tiene un huerto y próximamente un libro. Toda una experiencia de vida para los hermanos Manuel, José y Yolanda.
La Cocinita de papá lleva más de cinco años en línea, uno de sus grandes aportes es mostrar cómo padres e hijos pueden trabajar juntos en la cocina, diferencia y establece tareas específicas; presenta recetas sencillas, nutritivas e ingeniosas en formatos que le gustan a los niños. Encontrarán desde albóndigas, pasando por varios tipos de salsas para pastas, panquecas, galletas, tortas, pasteles, cocina china, española, pasando por creaciones propias aprovechando productos de temporada y del huerto.
En días recientes, José publicó fotos de los avances del huerto cómo era hace un año y cómo está ahora. «Al principio mi idea era que los niños supieran de dónde viene la comida, que no es tan fácil como ir al mercado». Narra que han ido aprendiendo por ensayo y error, pero destinaron un área del jardín de 12×12 metros, que ha implicado un gasto importante en tiempo, esfuerzo y dinero.
«Al principio los niños no estaban muy convencidos, porque el huerto exige trabajo, desde limpiar el monte, hacer el compost y los semilleros, manterlo ordenado, transplantar, hasta regar y cosechar. Pero ya le han agarrado el gusto. Vamos por el tercer año y este ha sido el mejor. Todos hemos aprendido mucho, desde qué sembrar, cantidades, dinámicas de trabajo y lo mejor es cuando disfrutamos en la mesa el producto de nuestro huerto».
Hasta el momento han cosechado maíz, caraotas negras, brócoli, coliflor, repollo, auyamas, berenjenas, fresas, calabacines, tomates, pimentones y ajíes picantes. Incluso el año pasado tuvieron sobre-producción de auyama de las que se beneficiaron amigos y vecinos. «Llegó un momento que habíamos preparado auyama de tantas maneras que empezamos a regalar, y eso nos dio una gran lección sobre los volúmenes de siembra», afirma Cecilia la madre de esta cocinita.
Quien hace un blog en su tiempo libre, sabe el enorme esfuezo que esto implica. Pero José lo actualiza regularmente, hace videos, transcribe las recetas, responde dudas. Personalmente, lo recomiendo porque hasta se han tomado el trabajo de verificar que las recetas estén bien escritas. Pero lo mejor es ver cómo tres hermanos crean y fortalecen lazos de amor y complicidad a través de un proyecto familiar, que además les enseña a comer bien, a entender el valor del producto y del trabajo.
A mis amigos que tienen hijos y me viven preguntando por recetas, aquí les dejo esta datazo. No se si llegarán a tener un huerto, pero pueden seguir las recetas, consejos y dinámicas en la cocina.
www.lacocinitadepapa.com